lunes, 23 de mayo de 2016

no pierdas a tus alucinaciones por política

no me importan
ni tu religión,
ni tu pédigre.

lo que sabés
de libros o
películas,
el diario
o la tele
a la mañana,
la radio
que escuchás,
tu acento,
tu manera
de vestir,
tus vicios,
la frecuencia
de tus pajas,
tus hábitos
alimenticios,
tu elección
definitiva
de objeto.

todo eso
es estrictamente
asunto tuyo.

pero cuidado:
si me llega
la factura
de la luz
por una luca
doscientos
y en vez
de acompañarme
en la puteada,
me instás
a pagar
con alegría,

no hablamos
de lo mismo
cuando hablamos
de un abrazo.