como seis
veces, pero
la relación
está en fase
dealer:
siempre hay
que esperar.
entonces
vengo acá
y escribo,
cambio
los muebles
de lugar,
hablo con
los gatos.
nada resulta.
nunca, pero
se rema.
como si
sortear
el agua
y nombrarte
fueran
una misma
cosa.