no tengo
más lugar
en el cuerpo
para rendirle
culto a la gira,
ni voy
a escribir
sobre los que
me visitan
cuando dejo
las pastas
o el escabio
de golpe.
todo bien
con el reviente,
pero no veo
la diferencia
entre dártela
en la pera,
o quedarla
en casa.
al detalle,
cualquier opción
es una nueva manera
de estar igualmente
equivocado.